Lo que el granizo me enseñó del dinero...

Mi hermano patinaba en todos lados; una vez patinó -sin chamarra- en pleno granizo. A mí no me gustaba mojarme, ni tener frío, ni tropezarme al patinar con las mínimas piedras de la calle. Ahora imagínense grumos de hielo tamaño palomitas de maíz del cine…

Siempre se movía. Era muuuy bueno para todo lo físico: patines, bicicleta, fútbol, béisbol, taekwondo¡Uuuf! Verlo volar por el aire saltando a siete chamacos hechos bolita en el piso, para encima romper una tabla con patada voladora. Boquiabierta y estupefacta.

Sabía decenas de trucos en la bicicleta, así que ante mi llegada tardía a la repartición de habilidades motoras: mi admiración era total. Aquí la sutileza: cierto, me deslumbraban su argucia y malabares, pero más, muchísimo más: su arrojo.

A veces azotaba en el camino de dominar una destreza, y aunque el primer hueso roto fue años después, las raspadas, los moretones negros eran frecuentes. Sabía además, los mejores remedios para ayudarle al cuerpo a acelerar su recuperación.

Su deseo de someter la siguiente acrobacia y su forma de divertirse eran contagiosas. De pronto no solo él quería lograrlo: lo añorábamos todos. La victoria, de una forma extraña, era de también nuestra.

Tengo dos semanas preguntándole a dos de mis mentores: “¿cómo manejas las metas grandes?”. Ah, porque les cuento, yo tengo una meta ambiciosa. Varias en realidad. Solo que ésta, la proceso enfrente de una audiencia, hay Soulmate Clients atentos a mis movimientos. Hay algunos colegas competitivos, despedazando cada resultado, comparándolo, disecándolo.

Este primer trimestre del año, probé más tácticas en mi negocio, que las que había hecho en todo el año pasado. Hice talleres en nuevas bandas de precio, webinars gratuitos, colaborados, charlas cerradas por invitación, afiliaciones, secuencias nuevas de correos, energía de invitación diferente, bueno, hasta solté la tarjeta a Mark para hacer anuncios...y ¡salí en la tele!**

“¿Y si no lo consigo?” Es la vocecita que parece muy real cuando me dice: “Tú, la que enseña a crear dinero, la chinguetas en #MagiaMarketera, pues, ¿no que muy sabrosa? ¿Qué van a pensar tus clientes si fallas?

Marzo me liberó de esa presión auto-impuesta. Andrea Rojas me dijo: "concéntrate en lo que sí puedes controlar, suelta el resultado". La voz de mi papá en mi mente: "Ni te creas tan importante, no estás al centro de atención del mundo". Yo encima le aderecé la diversión, el ajuste de timón y el arrojo. El retiro de ho'oponopono también hizo lo suyo.

Es cierto queridos míos, podré no ser posterchild de la estrategia mejor planeada de marketing, o el negocio digital que crece más rápido. Pero aquí frente a ustedes soy el epítome de tener los ovarios bien puestos. Como mi hermano, tendré los mejores remedios para curarse los moretes negros (y los voy a repartir en tarritos).


Abrazo,

Jess.

P.S. **Salí en la teleeeeee. Estoy tan emocionada como Wazowski. Video de entrevista en vivo en MVS AQUÍ, jiij

Jessica VazquezComentario